Todos los días tenemos la intención de hacer algo. Hasta para no hacer nada se requiere intención. La intención o la intencionalidad en chino se denomina Yi. El Yi debe ser algo vivo y fresco al practicar las Formas, de lo contario éstas serán realizadas con pesadez, flojera y des-atención.
Las Formas son un circuito de entrenamiento interesante del Yi ya que nos hacen pasar por diferentes etapas mentales. La intención, al inicio de la Forma (Inicio de T'ai chi), marca fuertemente cómo será el resto de la secuencia, es, como lo hemos dicho en reiteradas ocasiones, el dintel entre el mundo externo y el interno.
Inicio de T'ai chi marca el inicio, inicio de 'entrar' (con nuestro Yi o intención mental) en nuestra propia energética, el abrirnos a las sensaciones y las imagenes mentales que aparecerán mientras realizamos la secuencia de movimientos. Y el Yi se va modificando conforme continuamos las posturas y los movimientos. Al final esa intención regresa a su lugar de origen (Regreso al Origen), que no es otra cosa que un espacio interno/externo NO-DUAL.
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